El Día Mundial del Medio Ambiente es una de las fechas más importantes del calendario de las Naciones Unidas. Con el paso del tiempo, esta fecha se ha convertido en una plataforma mundial para concienciar sobre la protección de nuestro planeta. El tema de este año se centra en la restauración de ecosistemas. Y es que, los ecosistemas y su diversidad son el sustento de la vida en el planeta. Su cuidado y protección repercute de forma directa en la salud del planeta y sus habitantes.
Pakistán será el país anfitrión de este importante día. Su elección se debe a su ambicioso proyecto con el que se proponen plantar 10.000 millones de árboles en un plazo de 5 años. Se trata de uno de los esfuerzos más ambiciosos entorno a la forestación realizado hasta la fecha. Además, este día marcará el inicio del Decenio de las Naciones Unidas sobre la Restauración de los Ecosistemas 2021-2030, liderado por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente y la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación.
Este decenio tiene como objetivo no solo la recuperación de aquellos ecosistemas destruidos o degradados, sino también el cuidado y la especial protección de aquellos que aún están intactos. Unos ecosistemas saludables tienen múltiples beneficios para la vida en la Tierra desde ayudar a contar con una biodiversidad mucho más rica junto con unos suelos más fértiles, y como no, apuntalar la lucha contra el cambio climático. Es por ello que desde Naciones Unidas se ha realizado un llamamiento a toda la población bajo el lema “Únete a #GeneraciónRestauración”
Precisamente, la gestión de las aguas urbanas debe ser visto como un proceso clave para la conservación de las masas de agua y por ende, para garantizar la calidad de vida de las personas y la sostenibilidad del planeta. Por otro lado, se estima que solamente el 2,5% del agua de la tierra es dulce, y de este volumen, únicamente el 30% se encuentra en acuíferos subterráneos o en masas de agua superficiales y se puede emplear para el abastecimiento a la población. De ahí que la protección de este recurso escaso, su uso racional y su correcto tratamiento para devolver las aguas depuradas de nuevo al medio ambiente se conviertan en aspectos críticos el ámbito de la sostenibilidad, expresamente referenciados en la definición de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas.
En la actualidad, la variable ambiental deber estar presente e integrada en todos los niveles organizativos de cualquier empresa, sea privada o pública. Hoy en día resulta inviable no considerar la sostenibilidad en sus tres dimensiones (ambiental, social y económica) como uno de los pilares de la estrategia empresarial. La actividad de los operadores del ciclo urbano del agua está intrínsecamente ligada a la protección de los ecosistemas acuáticos. En el caso del Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia, el compromiso con la protección y mejora del medio ambiente queda patente en nuestra política ambiental.
Más allá de la conservación de las masas de agua y la garantía de un suministro continuo y de calidad, que son nuestra misión fundacional, nuestra acción ambiental se vertebra en torno a estos 4 ejes:
· Garantizar el cumplimiento de la normativa ambiental de aplicación.
· Minimizar el impacto ambiental de nuestra actividad en todas las fases del ciclo de vida de las infraestructuras que diseñamos, construimos y operamos.
· Fomentar la autogestión y valorización de los residuos que generamos.
· Avanzar en un uso más eficiente de la energía y en la implantación de instalaciones propias para la generación eléctrica a partir de energías renovables.
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