Evita el prelavado siempre que sea posible.
Aprovecha al máximo la capacidad de la lavadora e intenta trabajar siempre con carga completa, eso sí, sin sobrecargarla.
Llena bien la lavadora y elige el programa adecuado en función del nivel de suciedad.
Instala lavadoras eficientes. Existen lavadoras en el mercado con consumos de 6 l/kg por ciclo.
Existen lavadoras con sonda de agua, que miden la suciedad del agua y solo cambian cuando es necesario hacerlo. Este sistema ahorra agua y energía.
Las lavadoras de carga frontal normalmente consumen menos energía y agua que las de carga superior.